Cally Nueva...amando la vida

1.4.05

Juan Pablo II, sus principales dichoshttp://vpu.cl

La Pasión y Muerte de Juan Pablo II

Hace 18 años en un día como hoy el Santo Pontífice iniciaba su visita oficial por nuestro país. Su bendición se expandió como algo mágico por todo el territorio nacional y desde su visita ya no somos los mismos. Se reunió con los jóvenes, con los trabajadores y los pobladores de La Bandera.
Carolina Jorquera Oliva

No hay casualidades en las cosas de Dios, primero por que hace exactamente 18 años besó tierra chilena colmándola de bendiciones y segundo porque la complicidad entre Cristo y El Santo Padre fue tal que padeció en carne propia su pasión y muerte en pleno siglo XXI. Sólo, seres humanos tan especiales para Dios pueden morir en la cruz igual que su hijo y tienen la capacidad de llegar con su palabra hasta un lugar como Chile ,en el último rincón del mundo.

Hoy nuestro corazón está oprimido, un sin sentido se apodera de todo el mundo Católico, un escalofrío que cala hasta los huesos. La Iglesia pierde a su Pastor y la resurrección es nuestro único consuelo.
Es que el Santo Padre está revestido de una espiritualidad conmovedora, todos los que tuvieron el privilegio de mirarlo a los ojos lo saben. En Chile visitó la población La Bandera y desde ese entonces la fe floreció como una semilla que cae en buena tierra, en tierra humilde, pero en medio de personas que viven El Evangelio.

Recuerdo a la Señora Olga de La Bandera, ella decía “No se por que tanta conmoción por ver a un hombre que es igual que todos” Sin embargo, fue en ese mismo momento cuando la mirada de Juan Pablo II se posó sobre ella y un escalofrió le recorrió todo el cuerpo “Me miró con eso ojos azules penetrante….me miro Dios”

Es la encarnación viva de Jesucristo en el tercer milenio,”Tuyo Soy”, son las últimas palabras que pronunció en su agonía. Es un ser humano como cualquiera de nosotros, pero que entregó su vida al prójimo con una fe inquebrantable. Estamos llamados a ser como él, un hombre que a pesar de su padecer no abandonó la Cruz y siguió con su misión hasta el final.

La iglesia mira hacia los jóvenes”

Estemos contentos porque tuvimos el privilegio de ser contemporáneos a una persona que se entregó, que fue hostia viva en un mundo marcado por las guerras ,el terrorismo y el dolor de los inocentes .Fue Juan Pablo Segundo “Sal y luz del mundo”

“La iglesia mira hacia los jóvenes”dijo El Santo Padre, reconocido como el Papa más cercano a los jóvenes. Siempre creyó en nosotros y dijo en el Estadio Nacional ante 80 mi l personas “No tengas miedo de mirarlo a él” “El Amor es más fuerte” nos consideró como actores importantes de la sociedad.

El Cardenal Francisco Javier Errázuriz , recuerda nostálgico que El Sucesor de Pedro llamó a los Jóvenes a ser constructores del Reino de Dios y cambiar el destino del que sufre gastándose la vida en su proyecto.
“El Papa se alimentaba del Evangelio y enfatizaba que para ser discípulo se debía tomar la cruz y eso fue lo que él hizo tomó la cruz y cumplió la misión de Dios” recalcó El Cardenal.
En Madrid en mayo del 2003, fue el último encuentro del Papa con los jóvenes, oportunidad en que dejó claro la misión que tenemos hoy en la sociedad actual. Nos llamó a ser discípulos de Cristo ,a trabajar por La Paz y a mirar a la Virgen María como modelo insuperable de contemplación.

“Queridos jóvenes, ¡id con confianza al encuentro de Jesús!, y, como los nuevos santos, ¡no tengáis miedo de hablar de Él! pues Cristo es la respuesta verdadera a todas las preguntas sobre el hombre y su destino. Es preciso que vosotros, jóvenes, os convirtáis en apóstoles de vuestros coetáneos. Sé muy bien que esto no es fácil. Muchas veces tendréis la tentación de decir como el profeta Jeremías: «¡Ah, Señor! Mira que no sé expresarme, que soy un muchacho». No os desaniméis, porque no estáis solos: el Señor nunca dejará de acompañaros, con su gracia y el don de su Espíritu.”

Son conmovedoras estas palabras, El Papa joven nos dejó una misión: Debemos ser discípulos de Cristo, sin temor ni excusa.
“Amados jóvenes, sabéis bien cuánto me preocupa la paz en el mundo. La espiral de la violencia, el terrorismo y la guerra provoca, todavía en nuestros días, odio y muerte. La paz –lo sabemos– es ante todo un don de lo Alto, que debemos pedir con insistencia y que, además, debemos construir entre todos mediante una profunda conversión interior. Por eso, hoy quiero comprometeros a ser operadores y artífices de paz”
Estamos convocados a luchar por cambiar el mundo, por la paz….no hagamos oídos sordos a este llamado.
Juan Pablo II es conocido como un fiel admirador de la Virgen María y también nos llama a seguir su ejemplo:
“Queridos jóvenes, os invito a formar parte de la “Escuela de la Virgen María”. Ella es modelo insuperable de contemplación y ejemplo admirable de interioridad fecunda, gozosa y enriquecedora. Ella os enseñará a no separar nunca la acción de la contemplación”
Sus dichos calan profundo en nuestros corazones, tengamos en cuenta que Juan Pablo II nos dejó varias tareas por cumplir y nos dijo:
«Vosotros sois la esperanza de la Iglesia y de la sociedad. Sigo creyendo en vosotros, en los jóvenes».
….No lo defraudemos